Soliloquizing

A esas que te digan que no van a enamorarse de ti, no les creas. Mienten. Pero ten miedo de su amor, esas saben que lo harán y mienten pero ay de sus pobres ganas de sus pobres fuerzas de sus grandes ganas de irse tras otras manos labios. Sexo. No les creas, se enamoran con la misma fuerza que se van disparadas en plan de cohete interespacial.

No, sí sé, yo he sido una. Soy una. Voy siendo muchas.

Esas que 'podrían enamorarse de ti', cree. No mienten. No pueden, no tiene filtro entre cerebro y lengua, y dicen lo que sienten. Pero ten miedo de su honestidad, que no duran en su pellejo dos días. La que te ama hoy no te ama mañana y se enamora como se olvida. Créeles y mantenlas a raya, volátiles no es la palabra pero es la primera en la que pienso.

Que sí sé, también fui una. Las muchas que he sido y soy.

Esas que te dan consejos, todas están llenas llenísimas de mierda. Se la pasan diciendo cosas haciendo de matröska, una mentirita encima de la otra y estas dentro de la mentirita dentro de la otra al infinito. Puras pendejas, te digo. No hagas caso de lo que digan, míralas apenas a las tetas a las piernas a las ganas, a su boca si te parece que se mueve invitando.

Haz lo primero que te pidan las vísceras, con hambre, o el corazón o la menundencia o la molleja o el cólon o los músculos o el pene, o la vagina. O lo que te controle: tu barómetro corporal. Sólo eso es cierto, todo lo demás miente menos un cólico. Ese no miente ni las erecciones los sudores ni el frío. No hay mayor existencia que un cuerpo que se siente y se explora. Tu cuerpo que se desenrolla en otro cuerpo.

El mundo es apenas un cuerpo, igual de excitable, nada puritano, sabe responder y tocarte. Cada persona es un brazo, un árbol y una sonrisa. Acuéstate. Ninguna miente, pero no son la misma pal' día siguiente.